Las acciones europeas bajaron el miércoles, rastreando la debilidad en Wall Street, ya que los inversores se desconfiaron de las crecientes presiones inflacionarias que aumentan las probabilidades de un pronto endurecimiento de la política monetaria.

El índice paneuropeo STOXX 600 cayó un 1.1%, pero cotizaba menos del 2% por debajo de su máximo histórico. Los mineros, las acciones de viajes y tecnología fueron los principales declinantes.

Un salto en las facturas reguladas de electricidad y gas y los precios de la ropa y el calzado hizo que la inflación de los precios al consumidor británico se duplicara en abril, según los datos del miércoles.