La actividad empresarial de la zona del euro rugió en julio, expandiéndose a su ritmo más rápido en 15 años, a medida que el levantamiento de más restricciones de coronavirus y una vacuna acelerada impulsaron vida a la industria de servicios dominante del bloque, según una encuesta.

Pero las interrupciones de la cadena de suministro y la escasez de mano de obra significaron que los precios de los insumos aumentaron al ritmo más rápido en más de dos décadas y los temores de nuevas restricciones para contener la variante Delta más infecciosa de COVID-19 hicieron mella en el optimismo.

El último índice compuesto de gerentes de compras (PMI) de IHS Markit, visto como un buen indicador de salud económica, subió a 60,2 el mes pasado desde el 59,5 de junio, su nivel más alto desde junio de 2006, muy por encima de la marca 50 que separa el crecimiento de la contracción, aunque ligeramente por debajo de una estimación “flash” de 60,6.