IKEA, la marca de muebles más grande del mundo, está arrendando más barcos, comprando contenedores y redirrigiendo mercancías entre almacenes mientras trabaja duro para mitigar una “tormenta perfecta” de interrupciones de la cadena de suministro global que podría durar hasta el próximo año, dijeron los ejecutivos.

La compañía, que el jueves informó de ventas anuales récord como consumidores encerrados gastando más que nunca en sus hogares, también está reduciendo el número de versiones de algunos productos mientras lucha con la escasez de materias primas para garantizar que sus artículos más populares estén disponibles.

“Es volver a dirección y redirigir. Y en el lado minorista hemos aprendido agilidad como nunca antes porque todos los días tienes que trabajar con lo que tienes. Tienes que encontrar formas de resolver las necesidades de los clientes con limitaciones que nunca antes habíamos visto”, dijo Jesper Brodin, CEO de Ingka Group, propietaria de la mayoría de las tiendas IKEA.