México espera que la demanda que ha presentado en un tribunal estadounidense contra destacados fabricantes de armas por prácticas comerciales negligentes obligue a la industria a cambiar, a pesar de los esfuerzos de las empresas para que el caso sea desestimado, dijeron funcionarios mexicanos el viernes.
El gobierno mexicano argumenta que las compañías sabían que sus prácticas habían fomentado el tráfico ilegal de armas hacia México, ayudando a causar miles de muertes por pandillas.
La industria armamentística ha rechazado las acusaciones de México.