El líder de vehículos eléctricos Tesla ha subido sus precios más dos veces en cuestión de días, con BYD siguiendo el ejemplo.

La empresa china y el jefe de Tesla, Elon Musk, han señalado el aumento de los costes de las materias primas. Es una tendencia que amenaza el sueño de un vehículo eléctrico asequible para las masas.

Mantener viva esa esperanza aboga por coches más baratos y ligeros que utilicen tecnología de batería que deseche materiales ahora caros como el níquel y el cobalto en la medida de lo posible, tal vez incluso a costa del alcance. Algunos efectos son inevitables: las baterías necesitan litio y las carrocerías de los coches necesitan aluminio. Pero las cosas están cambiando. BYD está adelgazando las baterías mientras Tesla las integra en el chasis de los coches. Mientras tanto, la cantidad media de níquel y cobalto utilizados en los coches nuevos disminuyó un poco en el segundo semestre de 2021, un 2 % y un 9 % por coche, respectivamente, según una investigación de Adamas Intelligence.

Las ventas de vehículos eléctricos se han beneficiado de los costes restringidos de los productos básicos en los últimos años, así como de la mejora de la tecnología. Con el lado de los costos ahora volviendo loco, los fabricantes de automóviles pueden tener que pisar el acelerador cuando se trata del ritmo de innovación y adaptación.