IKEA, la marca de muebles más grande del mundo, está cerrando sus tiendas en Rusia y pausando todo el abastecimiento en el país y aliado Bielorrusia, uniéndose a la ola de empresas occidentales que frenan los negocios con Rusia después de su invasión de Ucrania.

La noticia, anunciada el jueves, llegó cuando el gerente minorista del propietario de la tienda IKEA, Ingka Group, dijo a Reuters que el fabricante de muebles económicos ahora esperaba que aumentara los precios en un promedio del 12% este año fiscal, en comparación con el 9% señalado anteriormente en medio del aumento de los costos de las materias primas y las interrupciones de la cadena de suministro.

“La devastadora guerra en Ucrania es una tragedia humana, y nuestra más profunda empatía y preocupaciones están con los millones de personas afectadas”, dijeron el propietario de la marca Inter IKEA e Ingka Group en una declaración conjunta.