La nueva aerolínea Mexicana de Aviación, propiedad del Estado mexicano, tiene planes de adquirir 20 aviones para fortalecer sus operaciones en México antes de que finalice la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador.

La compañía, administrada por el Ejército Mexicano como parte de Grupo Aeroportuario, Ferroviario y de Servicios Auxiliares y conexos Olmeca-Maya-Mexica, planea añadir destinos como Nuevo Laredo (Tamaulipas), Uruapan (Michoacán), Huatulco y Ciudad Ixtepec (Oaxaca) a su oferta de vuelos.

Actualmente, opera con aviones Boeing 737-800 y Embraer ERJ 145, aunque no se han dado detalles sobre la inversión para la compra de los nuevos aviones ni sobre el proveedor.