Todo es un juego con GameStop, hasta que alguien sale herido – Análisis

Por: Jack Janasiewicz, Estratega en Jefe de Natixis IM

“Gamificación” de los mercados, llámelo como quiera, se trata de operaciones libres de comisiones. Acciones fraccionarias. Confinamientos por la pandemia que nos dejan encerrados en casa, luchando contra el aburrimiento. Flujo ininterrumpido de noticias y en contacto continuo con las redes sociales.

La disrupción tecnológica, sin mencionar las circunstancias, ha hecho que sea más fácil y barato operar en los mercados en cualquier momento y lugar. Cualquiera con un teléfono inteligente y un dólar puede abrir una cuenta e invertir. Pero ante el clima de discordia social actual, no es de sorprender que las tensiones escalen desde la política y las protestas a otros sectores de la sociedad. Si combinamos estas dinámicas con un gran segmento de personas que se sienten privadas de sus derechos y descontentos hasta la rabia y la venganza, y no es de extrañar que el caso GameStop se haya convertido en un grito de guerra contra los mercados. Agreguemos Twitter y la propagación de información errónea y tendremos la receta perfecta para la manifestación de esta rabia. El estímulo masivo es la cereza del pastel. Probablemente no debería sorprender a los inversionistas que el resultado de esto sea casi ridículo.

Ciertamente, ha habido algunas opiniones interesantes sobre los sucesos recientes, incluyendo opiniones sobre los mercados, las reacciones y los posibles efectos. A continuación, algunas consideraciones interesantes. Sin una agenda particular. Solo observaciones personales.

El sistema necesita un respiro

Comencemos con el anuncio de hace un par de semanas para detener la negociación de las llamadas “acciones meme”. A los inversionistas particulares se les pidió una pausa cuando una serie de corredurías basadas en aplicaciones gratuitas para operar, así como corredores tradicionales, detuvieron la actividad de los mercados con algunos de los nombres que acapararon las noticias. Si bien el grito de guerra que resultó fue que las autoridades trataban de proteger a los fondos de cobertura, la verdad realmente estaba en otra parte. En pocas palabras, las actividades de back office de liquidación de operaciones estaban siendo invadidas y el sistema estaba a punto de colapsar bajo su propio peso.

Cuando se realiza una operación con acciones, hay un período de liquidación de dos días, que es el periodo en que el efectivo cambia de manos. Se me entrega el efectivo para pagar por la compra y recibo los ingresos de la venta. Si compro una acción el lunes, no se liquidará con el vendedor hasta el miércoles. El efectivo no cambia de manos para la transacción hasta dos días después de la fecha de la operación.

Sin embargo, lo que debemos tener en cuenta es que las cuentas de corretaje libre suelen registrar a usuarios para cuentas al margen. Es cierto que esto es de sorprender. ¿Por qué? Porque una cuenta al margen es un tipo de cuenta de correduría que permite a los inversionistas comprar valores con fondos prestados. Técnicamente hablando, esto significa que las aplicaciones para operar esencialmente están prestando dinero a todos los interesados ​​en negociar acciones vía mensajes de texto. También significa que los requisitos regulatorios obligan a estas corredurías a proveer efectivo a través de una empresa de autorización en la fecha de la negociación para asegurar que la actividad de liquidación se realice dos días después. Estos requisitos reducen el riesgo de contraparte en los mercados: el efectivo está ahí, así que ¿de qué preocuparse?

En condiciones normales de mercado, este pago no es gran problema. Las empresas saben que tienen que obtener el efectivo para la liquidación y, por lo general, no batallan para hacerlo. Pero la reciente explosión de volumen en estas populares acciones meme significó que los requisitos de financiamiento para algunas acciones repentinamente se dispararon dramáticamente. Imagínese ser un corredor en una aplicación para operar libremente y ahora necesitar encontrar unos cuantos miles de millones de dólares prestados con poca anticipación para liquidar estas operaciones. Considere que mientras, sus clientes continúan tomando posiciones en estas mismas acciones a un ritmo alarmante, lo que significa que deberá obtener aún más efectivo. Y mientras contempla esto, agregue el hecho de que la Depository Trust & Clearing Corporation, el almacén de liquidación para el mercado estadounidense, de hecho elevó los requerimientos de garantía para estas mismas acciones meme, aumentando aún más el costo de los procedimientos de liquidación de fondos. ¿Por qué elevar los requerimientos de garantía? Volatilidad. Los posibles costos de las garantías estaban aumentando. Si aumenta la volatilidad, también aumentan las probabilidades de pérdidas y se requiere más garantía para protegerse contra esto.

No es de extrañar, entonces, que la prisa por recaudar dinero para hacer frente a la liquidación fuera abrumadora, y que la única forma de frenar el ritmo rápido y furioso era limitar la operación con dichos valores. Si vendo una acción, espero que las ganancias lleguen a mi cuenta en dos días. Comparo otras transacciones con esto, esperando tener ese dinero en mi cuenta. ¿Qué sucede cuando el corredor no puede liquidar el pago y mis ganancias no llegan? No puedo entregar ese dinero a la siguiente persona a la que se lo debo. Esto nos deja cortos de efectivo, incluidos los acreedores, y así comienza una reacción en cadena de fallas en el mercado. Esto también a veces se conoce como “contagio.” ¿El peor escenario? El Sistema se colapsa y potencialmente cae por su propio peso. 

Si las corredurías libres que permiten que los clientes negocien al margen no pueden entregar efectivo y actuar en nombre de sus clientes desde una perspectiva financiera, entonces la correduría se va a la quiebra y las cuentas se diluyen. ¿Bancarrota? ¿Liquidación? Nada bueno para el sentimiento del mercado, al menos. En pocas palabras: detener las operaciones fue una decisión racional para estas corredurías, diseñada para evitar que el sistema se colapsara. Evitó que no cumplieran con sus obligaciones financieras y, finalmente, la quiebra. Esta no era una agenda oculta para proteger los fondos de cobertura, era la función del sistema tal como fue diseñada para salir a flote.

Recuerde el apetito por el riesgo

Constantemente mencionamos el apetito por el riesgo y lo importante que es para la dirección del mercado. El aumento del apetito por el riesgo empuja al mercado al alza. Una pérdida de apetito por el riesgo tiende a conducir al mercado a la baja. La oferta y la demanda son impulsadas por el apetito por el riesgo; es el corazón del mercado. Todo se reduce al apetito por el riesgo, y los mercados actuales nos brindan un gran ejemplo.

¿Qué impulsa el apetito por el riesgo? Sentirse seguro de las proyecciones, de las finanzas. Un nivel de comodidad sabiendo que si se arriesga y fracasa, el daño será limitado y absorbido con consecuencias relativamente mínimas. El otro factor determinante: ver que otros ganan dinero mientras uno se lo pierde. Pregúntese a sí mismo o a colegas y amigos: ¿por qué hay acumulación de estas acciones meme? ¿Es porque se crees que son baratas? ¿Devaluadas? ¿El mercado no comprende el modelo de negocio? ¿O es por los retornos asombrosos que aparecen en la TV, teléfono o computadora? Dicho de otra manera, ¿es porque vemos a otros ganar dinero y uno se lo está perdiendo?

Ésta es la definición misma de apetito por el riesgo. Creo que los mercados pueden poner demasiado énfasis en los fundamentales y poco en los aspectos técnicos y el sentir. El caso en cuestión aquí es que aquellos que intentan lograr los máximos del mercado en función de las valoraciones deben tener en cuenta que el apetito por el riesgo puede llevar a los mercados a niveles mucho más allá de lo que parece racional. Las valoraciones no son más que una opinión. Todos tenemos una. Ninguna es realmente 100% correcta o no. Pero el punto es que no tenemos idea del precio que estamos dispuestos a pagar por algo que queremos tener. El apetito por el riesgo es el factor decisivo. En parte, las valoraciones son un intento de obstaculizar el apetito por el riesgo del comprador, el precio que estoy dispuesto a pagar. El apetito por el riesgo puede llevar a las valoraciones más allá de los niveles que un análisis serio considera caro.

Efecto dominó

A los inversionistas podría convenirles saber qué valores registran un aumento rápido, o short squeeze. Esto ocurre en mercados de opciones a corto plazo donde el apalancamiento (fondos prestados) puede ampliar su impacto. En términos generales, se llevan a cabo en sectores menores del mercado, pero el mercado general también lo resiente. ¿Por qué? Gestión de riesgo. A medida que aumenta la volatilidad, los reguladores llaman la atención de los corredores y administradores de portafolio para decirles que reduzcan su riesgo. Eso puede significar desinflar posiciones o vender posiciones en valores comprados con préstamos. También podría significar vender posiciones largas para reducir la exposición al mercado. Esta probablemente sea la razón por la que vimos ventas relativamente homogéneas en la renta variable de EEUU en la última semana de enero, una señal certera de una reducción del riesgo generalizada. Este es el efecto dominó que estoy destacando.

¿Nuevos jugadores, nuevas reglas?

En el más largo plazo, espero que esta nueva ola de inversionistas siga floreciendo. Nótese que usé el término inversionistas, no corredores improvisados. En parte me preocupa que algunos de estos nuevos actores del mercado se conviertan en carne de cañón. Dicho de otra manera, servirán como compradores para que aquellos que compraron acciones anticipadamente tengan a quien cobrar y, por tanto, registren ganancias. Alguien tendrá que pagar los platos rotos cuando esto termine. Espero que no sean los inversionistas minoristas que no tenían ni idea de lo que pasó, porque si el más “pequeño” es el que termina lastimado, va a haber muchas acusaciones. Esto podría conducir a una mayor regulación, para bien o mal. ¿Qué podría implicar esto? el hecho de que cualquiera pueda abrir una cuenta al margen sin experiencia alguna en los mercados financieros es algo preocupante. Este puede ser el enfoque. Si estas apps de libre operación hubieran abierto cuentas de efectivo normales en vez de cuentas al margen, estas interrupciones a las operaciones no habrían sido un problema y no hubieran ocurrido. En cuanto al mercado de opciones, mi instinto me dice que es posible que también sea necesario hacer algo. El tamaño del mercado de opciones es enorme, y la capacidad de aumentar posiciones a través de sus facilidades de endeudamiento integradas probablemente debe someterse a consideración. Lo anterior se convierte en la conclusión más importante: el hecho de que las nuevas deficiencias de la estructura del mercado han quedado al descubierto. Las regulaciones se imponen para proteger el interés del cliente, y las reglas del mercado están diseñadas para evitar que el sistema se auto destruya. Lo que hemos presenciado son dichas regulaciones operar como se pretendía. ¿Hay margen para mejorar? Si. O quizá. No tengo la respuesta, pero ciertamente podemos esperar cambios regulatorios derivados del caso GameStop.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.