Es poco probable que el reciente aumento de la inflación estadounidense conduzca al tipo de inflación indeseablemente alta de la que algunos economistas notables han advertido, dijo el martes el presidente del Banco de la Reserva Federal de Chicago, Charles Evans, reiterando su apoyo a la política súper fácil de la Reserva Federal.

“Todavía no he visto nada que me convenza de cambiar mi pleno apoyo a nuestra postura acomodaticia para la política monetaria o nuestra orientación hacia el futuro sobre el camino hacia la política”, dijo Evans en comentarios preparados para la entrega a una conferencia del Banco de Japón.

Los críticos, incluido el ex secretario del Tesoro Larry Summers, dicen que la promesa de la Reserva Federal de mantener las tasas en su nivel actual casi nulo hasta que la economía alcance el pleno empleo y la inflación haya alcanzado el 2% y esté en camino de superar ese nivel moderadamente durante algún tiempo es una receta para sobrecalentar la economía.