Frente a la presión para frenar la creciente inflación, el Banco de Inglaterra parece listo para volver a aumentar las tasas de interés el jueves y señalar un mayor desenrollamiento de su estímulo pandémico, incluida una inversión gradual de su enorme plan de compra de bonos.

Veintinueve de los 45 economistas encuestados a finales del mes pasado dijeron que el Banco de Inglaterra aumentaría la tasa bancaria al 0.5% desde el 0.25% en su reunión de febrero, inmediatamente después del aumento de las tasas de diciembre, el primero por un importante banco central desde la pandemia.

Marcaría los primeros aumentos consecutivos del costo de endeudamiento por parte del Banco de Inglaterra desde 2004, lo que refleja una necesidad urgente de demostrar que está en la cima de un aumento inflacionario.