En una entrevista con el conductor de televisión Don Lemon, el 18 de marzo de 2024, Elon Musk reveló que consume una pequeña dosis de ketamina cada dos semanas. Según el empresario originario de Sudáfrica, esta práctica le ha servido para salir de estados mentales negativos, relacionando esta sustancia con el tratamiento para la depresión.
De acuerdo con Family Addiction Specialist, la pandemia por Covid-19 dejó un embate sobre la salud mental de los millonarios, y un gran número de personas ricas recurrieron a medicamentos de prescripción. La organización especializada en adicciones con sede en Nueva York señaló: el diagnóstico de depresión se ha convertido en un detonante de adicción a fármacos.
A pesar de que la depresión se encuentra de manera predominante en personas con ingresos menores a 10 mil dólares anuales, ningún estrato socioeconómico está libre de padecerla, informó Psych Central. Para Elon Musk, esta condición se encuentra sobrediagnosticada en Estados Unidos, por lo cual recomendó consumir ketamina de manera ocasional en un comentario del 26 de junio de 2023.
Según a Escuela de Salud Pública de Bloomberg Johns Hopkins, la ketamina es un fármaco utilizado en anestesia, especialmente durante procedimientos de quirófano. No obstante, señaló que un hueco legal en la regulación de medicamentos de Estados Unidos ha permitido comprar esta con otro etiquetado, el cual presuntamente se utiliza para ansiedad, depresión, trastorno de estrés postraumático, entre otros.
Durante octubre de 2023, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) reveló que fórmulas magistrales con ketamina abundan en el mercado estadounidense. Asimismo, la comercialización se usa para tratar algunos padecimientos psiquiátricos, pero no cuenta con la aprobación de seguridad y eficacia por parte de la FDA. Cabe señalar, el 11 de marzo de 2024, New Scientist reveló que el consumo de este fármaco goza de popularidad entre figuras como el Príncipe Harry, miembro de la familia real británica.
Cabe señalar, respecto a las dificultades de la ketamina en su presunto uso terapéutico, el artículo señaló que existe un abuso de la ketamina en un contexto recreativo, lo cual dificulta su adopción como tratamiento terapéutico, incluso bajo automedicación. Al respecto, la Biblioteca Nacional de Medicina (NIH) advirtió que la automedicación con ketamina tiene una alta incidencia de sobredosis fatal, con 89.1% de los casos estudiados en 2023.