El gobierno de Andrés Manuel López Obrador considera que hay condiciones para una transición ordenada del poder este año, gracias a la estabilidad macroeconómica y la buena salud de las finanzas públicas, según Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda y Crédito Público de México.

Ramírez de la O reiteró que la política fiscal de la actual administración ha permitido cumplir con el compromiso de preservar la estabilidad macroeconómica y mantener la deuda en una trayectoria sostenible. Además, ha implementado medidas para fortalecer las arcas públicas sin necesidad de crear o subir impuestos.

“Este compromiso se seguirá manteniendo en el último año de este gobierno”, afirmó el secretario de Hacienda, durante la 32 Reunión Plenaria de Consejos Consultivos de un Banco. “Y hacemos lo que nos corresponde para una transición suave y ordenada” tras las elecciones de junio y el fin de la administración en septiembre.

Ramírez de la O destacó que la estabilidad macroeconómica se refleja en varios indicadores económicos, como la inversión extranjera directa. En 2023, México se consolidó como uno de los destinos más importantes para el capital foráneo, con 36 mil millones de dólares, su tercer mejor registro hasta la fecha.

El funcionario también mencionó que la tendencia favorable de la inversión extranjera puede ser aún mejor en 2024, gracias al impulso generado por la relocalización de empresas o nearshoring en territorio nacional.

El gobierno proyecta que la economía mexicana crecerá entre 2.5% y 3.5% en 2024, con una estimación puntual de 3%. Aunque esto implica una ligera desaceleración frente al año previo, las autoridades confían en que el nearshoring impulsará el crecimiento económico con la llegada de empresas a los distintos polos industriales, algunos de los cuales se establecerán en la zona sur del país como parte del proyecto del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.