El aumento al salario mínimo en Venezuela parece insuficiente para adquirir una amplia gama de artículos, señalaron opositores políticos y medios de prensa.

El aumento prácticamente duplicó el monto de la percepción, pues fue de 95 por ciento, y entró en vigor el mismo día de su anuncio, este lunes.

El salario mínimo llegó a dos millones 555 mil 500 bolívares, que integran un millón de salario y un millón 555 mil 500 de bono alimenticio.

Sin embargo, un kilo de carne cuesta en promedio dos millones 24 mil bolívares, 87 por ciento de la nueva percepción.

Un cartón de huevo cuesta entre un millón 200 mil y un millón 500 bolívares, alrededor de la mitad del salario mínimo integrado.

Por su parte 28 pastillas anticonceptivas, en el mercado informal, se obtienen en cuatro millones 500 mil bolívares, dos millones más que el salario mínimo integrado.

Ante esa situación el uso del condón ha sido la opción, pese a que su precio actual llegó hasta a los 400 mil bolívares, poco menos de una sexta parte del salario integrado.

Ante esa situación Julio Borges, líder opositor y miembro de la legislativa Asamblea Nacional, dijo que la nueva percepción “ni siquiera alcanza para un kilo de pollo”.

Por ello, insistió en la necesidad de que se de un cambio de gobierno y de política económica, pues de lo contrario seguirá aumentando el costo de la vida para los venezolanos.

NTX