Tras dos años de cómodo gobierno, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, vivirá en 2021 una prueba de fuego con las elecciones más grandes de la historia del país, en las que está en juego el control del Congreso, el dominio de casi la mitad de los estados y el futuro de su agenda de reformas.
“El presidente se juega la aprobación ciudadana a su primera parte de gobierno y la ratificación de la mayoría de su partido en la Cámara de Diputados”, explicó el politólogo David Morales, profesor de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).