Los cadáveres de 16 migrantes guatemaltecos que fueron asesinados en enero en el estado mexicano de Tamaulipas llegaron la mañana del viernes a Guatemala, donde sus familias los esperaban para darles sepultura y exigieron que se haga justicia.
Las cajas con los restos arribaron procedentes de México, que corrió con los gastos del traslado. El Consejo Nacional de Atención al Migrante de Guatemala se hará cargo de los traslados hasta las comunidades y el gobierno declaró tres días de duelo.