México tiene la posibilidad histórica de cara a 2022 de realizar el ejercicio ciudadano de revocación de mandato el 10 de abril. Entre polémicas debido a la insuficiencia presupuestaria declarada por el Instituto Nacional Electoral (INE) y la promoción del Ejecutivo federal, finaliza el 25 de diciembre de 2021 la fecha para recabar firmas.
Fue en campaña cuando Andrés Manuel López Obrador (AMLO) prometió realizar una consulta a mitad de su mandato para que la ciudadanía determine si seguía en el cargo o debía renunciar.
La revocación de mandato es un instrumento “solicitado por la ciudadanía para determinar las conclusión anticipada en el desempeño de la persona titular de la presidencia de la República, a partir de la pérdida de confianza“, señala el INE. Para llevar a cabo este proceso de captación, se requiere la inscripción del 3% de ciudadanos mexicanos en al menos 17 entidades federativas.
Según datos preliminares del INE al 24 de diciembre de 2021, mediante la aplicación Mi Apoyo se recabaron 1 millón 372 mil 963 firmas. Por su parte, el 3% de participación es de 2 millones, 758 mil 227 personas, informó en un tweet el Instituto el 25 de diciembre.
Desde la planeación del ejercicio se presentaron diversas polémicas alrededor del tema tal como la papeleta y su pregunta hasta el presupuesto requerido para ejecutar la consulta de revocación de mandato. El INE solicitó 3 mil 800 millones de pesos para organizar la consulta de revocación de mandato y la Cámara de Diputados no aprobó el monto. Ante ello, el Instituto promovió un recurso de amparo ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y dispuso pausar las actividades, pero el 22 de diciembre, la SCJN dictaminó al INE continuar con el presupuesto existente de mil 500 millones de pesos.
AMLO expresó el 23 de diciembre en su conferencia matutina, “me gustó la resolución de la Corte para que siga adelante el proceso de revocación del mandato“. Si bien no hay una definición sobre el asunto de la consulta de revocación de mandato, el mandatario federal expresó estar satisfecho y dijo, “no se debe de obstaculizar la democracia“
Otra de las controversias del proceso de revocación de mandato (que finaliza el 25 de diciembre) fueron las inconsistencias encontradas a los promotores de recabar firmas. Durante la corroboración de los apoyos, el órgano electoral encontró al 16 de diciembre que 71 mil 755 firmas para la revocación habían sido falsificadas. Esto representó un 13% de todas las firmas recabadas en su momento. Ciro Murayama, consejero electoral del INE dijo, se dieron de baja a 10 promoventes y auxiliares que presentaron las firmas bajo el criterio de que casi todos los apoyos que entregaron eran fotocopias de la credencial de elector, por lo que no eran reales.
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