Gran Bretaña está a punto de dejar de lado los planes para proporcionar poderes legales a un nuevo regulador de tecnología, en un golpe a los esfuerzos globales para frenar el dominio de las empresas de Internet, incluidas Google y Facebook, informó el Financial Times.
No se espera que el nuevo programa legislativo del gobierno incluya un proyecto de ley que proporcione apoyo legal a la unidad de mercados digitales que tiene su sede en la Autoridad de Competencia y Mercados (CMA), informó el FT, citando a las personas informadas sobre la situación.
El gobierno dijo que necesitaba responder a una consulta concluida en octubre pasado sobre su nuevo régimen de competencia para los mercados digitales, y no podía hacer comentarios sobre los plazos para ninguna legislación futura.