El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) estima alcanzar ganancias en su segundo año de operación, pues aunque la oferta de vuelos ha incrementado paulatinamente, aún hay desafíos para crecer, como la degradación de la seguridad aérea mexicana a Categoría 2.

“[La rentabilidad] la tenemos proyectada para cuando cumplamos dos años, entre diciembre de 2023 y marzo de 2024”, dijo Isidoro Pastor, director general del AIFA, en entrevista con medios durante el vuelo inaugural de la aerolínea dominicana Arajet.

El funcionario también dijo que, a la fecha, el aeropuerto ha atendido a casi 300,000 usuarios, y estimó que el aeropuerto cerrará el 2022 con un tráfico de entre 600,000 y 700,000 pasajeros. Para el cierre de su primer año en operaciones, en marzo de 2023, prevé rebasar un tráfico de un millón de pasajeros.

El AIFA viene de una temporada en la cual las líneas aéreas han agregado varias rutas. Aeroméxico duplicó las rutas que ofrecía, que pasaron de tres a seis destinos; Volaris agregó nueve vuelos a los dos que ya tenía, y Viva Aerobus agregó cinco rutas nuevas en julio y tres más a inicios de septiembre.