Un grupo de más de 30 empresas mexicanas inició acciones legales para demandar el pago de más de 32 millones de dólares a Sapura Energy Mexicana SAPI de CV por las subcontrataciones en obras y servicios que realizaron para PEMEX y clientes privados como Hokchi y ENI, en sus plataformas de la Sonda de Campeche, Litoral de Tabasco y Veracruz.
Sapura Energy Mexicana SAPI de CV, subsidiaria de Sapura Energy, empresa de Malasia, proveedora de servicios integrados en el segmento upstream (exploración, descubrimiento y producción de petróleo y gas), enfrenta problemas financieros y legales a nivel global, por lo que ha suspendido el pago a proveedores de servicios en México, desde el último trimestre de 2021.
De acuerdo con las empresas proveedoras (pequeñas y medianas), el incumplimiento de pago ha causado la quiebra de algunas, y ha puesto a otras en riesgo su viabilidad operativa y financiera por no poder hacer frente al pago de créditos vencidos, pago a trabajadores, obligaciones fiscales, pago a proveedores, etc.
Sapura Energy ha ganado diversos contratos desde la implementación de la reforma energética del presidente Enrique Peña Nieto para obras directas a PEMEX y otras grandes empresas que realizan trabajos de exploración y explotación de hidrocarburos en la zona. Para poder operar y cumplir con sus compromisos contractuales Sapura Energy trabaja con empresas mexicanas pequeñas y medianas para el desarrollo de las obras, a quienes solicita crédito hasta por 90 días, garantizando que una vez que reciba los pagos de sus clientes,
liquidará sus adeudos. Sin embargo, se niega al pago de diversos productos y servicios, a pesar de que PEMEX y otras empresas le han realizado cuantiosos pagos por sus servicios, ingresos que recibe por trabajos generados en México y que al no contar con esos fondos para cumplir con sus obligaciones, presumiblemente los saca del país y los envía a Malasia o a cualquier otro país donde tiene otras subsidiarias, probablemente para compensar las pérdidas que tuvo el año pasado, en el que de acuerdo a reportes, perdió 2,000 millones de dólares y estaba en quiebra en Malasia.
Por ello, las empresas proveedoras de SAPURA Energy han iniciado acciones legales a través de juicios para demandar el finiquito de los adeudos, de los que han derivado el embargo de las cuentas bancarias de la empresa de origen malayo, que han resultado insuficientes para cubrir todos los adeudos.
Las empresas proveedoras consideran que la Secretaría de Marina debería establecer medidas más estrictas antes de permitir que las embarcaciones o artefactos navales de este tipo de empresas transnacionales, que recibieron los productos y servicios adeudados salgan de aguas nacionales, como ya ocurrió con los de SAPURA Energy, lo cual impide que se puedan embargar para garantizar el pago a sus proveedores.
Agregan que autoridades como la Secretaría de Energía, la Comisión Nacional de Hidrocarburos, la Comisión Federal de Mejora Regulatoria, y el Servicio de Administración Tributaria, deben estar alertas sobre las malas prácticas empresariales, y establecer reglas claras y transparentes respecto de las operaciones de este tipo de empresas transnacionales en México.