Para lograr una cobertura universal de los servicios de salud, es indispensable cerrar la brecha entre la digitalización y la atención médica y, con ello, hacer accesibles los servicios sin importar el lugar donde se encuentren los pacientes.
Así lo subrayó la titular de la Comisión de Banda Ancha y del Grupo de Trabajo de Salud Digital de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ann Aerts, al dar a conocer los principales hallazgos del reporte de Salud Digital 2018.
En conferencia de prensa, destacó que se identificaron tres factores de éxito para lograr esta cobertura universal y que consisten en lograr un liderazgo visionario comprometido y sostenido para que lo digital entre al sistema de salud.
Un segundo factor de éxito es lograr que los países identifiquen y pongan en marcha un sistema de salud digital. Finalmente, el tercero es elaborar una estrategia digital nacional, en el que las normas regulatorias sean claras para que los sistemas sean interoperables.
El objetivo es lograr que exista una interconectividad sin importar que se trate de países de altos o bajos ingresos, lo cual es un obstáculo para el acceso a la tecnología.
Ann Aerts agregó que este año, el grupo de trabajo sobre salud digital se enfocó además en el tema de las enfermedades no trasmisibles, y que hoy constituyen la crisis global más importante de los últimos tiempos.
Este problema suma a una agenda no terminada de enfermedades infecciosas, problemas materno infantiles y un fenómeno de urbanización rápida que han propiciado una mayor demanda en la atención de la salud.
Aclaró que, aunque muchos de estos padecimientos han dejado de ser exclusivos de la gente rica o pobre, lo difícil es que entre el 65 y 80 por ciento de la mortalidad por enfermedades sigue ocurriendo en naciones de bajos ingresos.
Ante este panorama, insistió en el que el reto es definir cómo podemos integrar los diferentes sistemas de salud, ya que países como los que están en África, Asia y Latinoamérica “no están del todo listos para enfrentar esta doble carga de la enfermedad”.
Para estos, subrayó, la digitalización es el habilitador más importante para transformar el sistema de salud, ya que es la mejor opción para incrementar el acceso y calidad de los servicios, asistido por una red sólida de especialistas interconectados para garantizar sus servicios.
Para ello, expuso que en los próximos años habrá que centralizar la experiencia de servicio médico digital y hacer que cada vez más pacientes hagan consultas telemédicas, para lograr una verdadera atención universal.
NTX