Es preocupante que la Fiscalía General de Puebla atribuya el asesinato del activista y líder comunitario, Manuel Gaspar Rodríguez, a “motivos personales” y que también haya descartado cualquier línea de investigación relacionada con su rechazo a la operación de un relleno sanitario ilegal, a diversos proyectos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y a los derechos de las comunidades indígenas, afirmó el abogado Leonel Rivero.
Representante legal de la familia de Manuel Gaspar, Rivero explicó que el líder campesino fue asesinado el pasado 15 de mayo en Cuetzalan, Puebla, crimen que se cometió con saña y con una fuerza que excede a la de una persona sola como sostiene la versión de las autoridades ministeriales que ya imputaron el crimen a una persona, identificada como Isaú “N”, quien supuestamente confesó motivos personales.
Entrevistado luego de que un presunto responsable fuera vinculado a proceso por el homicidio, el litigante dijo que no se debe descartar ninguna línea de investigación hasta que concluya el plazo de tres meses que un Juez de Control determinó para la investigación complementaria, destacando que no se conoce la mecánica de los hechos.
“Se nos hace muy preocupante que la Fscalía a priori deseche las demás hipótesis de investigación y señale, aún sin tener pruebas suficientes y sin que haya concluido el periodo complementario de investigación, que ya hay una línea de investigación fortalecida y que el móvil del crimen es de carácter personal”, advirtió.
Destacó que en las imágenes filtradas sobre el crimen del defensor de derechos humanos y dirigente del Movimiento Independiente Obrero, Campesino, Urbano y Popular (MIOCUP) se observa sangre en todas las paredes y por todo el piso de la casa donde fue localizado el cuerpo de Manuel Gaspar, con lo que se evidencia la saña con la que se cometió el ataque.
“Despierta mucha suspicacia que una sola persona pudiera llegar a este nivel de sadismo y que pudiera cometa sola el delito”, sentenció.
El abogado Leonel Rivero agregó que una indagatoria seria “tiene que avanzar en todas las líneas de investigación para que la propia investigación vaya desechando hipótesis por hipótesis, hasta establecer la autoría y el móvil de cualquier delito”.
Por último, recordó que otro líder del MIOCUP, Antonio Esteban Cruz, fue asesinado en Cuetzalan en el año 2014, cuyo caso se mantiene la impunidad debido a que la Fiscalía General de Puebla imputó el crimen de este a cuatro personas, teniendo como única prueba el testimonio de dos personas que en el juicio oral contra los presuntos responsables se retractaron de las mismas.
“En 2014 otro integrante del MIOCUP fue asesinado en Cuetzalan, la Fiscalía no tuvo empacho en arreglar y fabricar el testimonio de dos testigos que imputaron el crimen de Antonio Esteban a cuatro personas, las cuales fueron liberadas posteriormente, ya que en el juicio ambos testigos se retractaron de sus declaraciones y reconocieron que ellos no habían dicho lo que la Fiscalía asentado en la carpeta de investigación”, concluyó.
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