Ante los asaltos a embarcaciones en el Golfo de México, registrados en los últimos días, la Cámara Mexicana de la Industria del Transporte Marítimo (CAMEINTRAM) pidió ayuda a la Secretaría de Marina para detener estos robos y evitar que escalen a otros ilícitos.
Armando Ramírez, director general de la CAMEINTRAM, dijo que este tipo de crímenes, aunados a la epidemia sanitaria provocada por el coronavirus, está modificando los protocolos y hábitos de los marinos y trabajadores que utilizan las embarcaciones.
“Las embarcaciones estamos haciendo un esfuerzo para que las tripulaciones estén 28 días a bordo y 28 días abajo, cuando antes eran 14 días y 14 días”
Armando Ramírez
director de la CAMEINTRAM
Esto permitiría que se reduzcan los riesgos de contagio de la tripulación, pero, de acuerdo al directivo, podría conllevar algunos problemas para la salud mental de los tripulantes, lo que se suma a los atracos que deben ser combatidos por las autoridades.
Armando Ramírez también señaló que una forma efectiva para proteger a los tripulantes de embarcaciones en la zona de Dos Bocas, Tabasco –cuyas labores se consideran como actividad esencial para la nación y por ello no pueden detenerse– sería contar con un teléfono directo con las autoridades marítimas, a fin de obtener una respuesta más rápida.
De acuerdo con el director de la Cámara de Transporte Marítimo, esta misma semana sostendrán reuniones con la Secretaría de Marina y otras autoridades civiles encargadas de investigar el tema para buscar un alto a este tipo de delitos, que hoy sólo han afectado a la tripulación, pero que al ver la impunidad con la que pueden actuar, pronto podría evolucionar a otras actividades ilícitas.
Por su parte, el diputado de Morena, Enrique Martínez Aké, reconoció que los atracos se producen porque “no hay una efectiva vigilancia de parte de la Marina y si esto no ocurre, difícilmente podremos detener estos crímenes”.
El legislador de Morena por Campeche dijo que no solo las embarcaciones que laboran en la zona petrolera han sido blanco de estas “bandas muy estructuradas de criminales”, que atacan a embarcaciones de altura, como las petroleras y camaroneras, también atacan a los productores ribereños.
“En muchas ocasiones, los pescadores dejan sus lanchas a la orilla de la playa, cuando amanece ya no tienen el motor, ya les robaron herramientas, cualquier cosa”, dijo Martínez Ake.
Actualmente el Código Penal Federal castiga la piratería con penas que van de los 15 a los 30 años de prisión, pero el diputado de Morena considera que se puede avanzar en un tipo penal más efectivo, pero hasta el momento ningún legislador ha retomado esta idea para llevarla a tribuna.