En mayo se vendieron en México 42 mil 28 autos nuevos, 59 por ciento menos que lo registrado en el mismo periodo del año pasado, informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Esta es la mayor caída que presenta la industria para un mes similar en 25 años; la comercialización de vehículos en el quinto mes de 1995 se desplomó 75.1 por ciento.
Esta caída en la venta de vehículos se debió a la medidas sanitarias implementadas por el Gobierno de México para enfrentar al COVID-19, donde se decidió que todas las empresas que no fueran esenciales –incluyendo a las agencias automotrices- suspendieran labores desde el 31 de marzo hasta el 30 de mayo.
“Estos resultados se dan en el marco de la pandemia COVID-19 que azota a nuestro país y que ha impactado negativamente al mercado automotor ante las medidas de aislamiento social decretadas por las autoridades sanitarias para hacer frente a los contagios, la desconfianza e incertidumbre generada entre los consumidores y el deterioro de las condiciones económicas de muchas familias”, dijo Guillermo Rosales, director general adjunto de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Destacó que para vender autos, las empresas automotrices mejoraron su capacidad de ejecución de ventas online, utilizando las tecnologías de la información por parte de los distribuidores y encontrando una mayor confianza de los consumidores para su realización.
En cifras acumuladas, entre enero y mayo se vendieron en México 373 mil 608 autos, 30 por ciento inferior a lo registrado en igual lapso del año pasado, siendo la mayor reducción que presenta el sector desde 2009, cuando fue la crisis económica global.