Países de toda Europa consideraron nuevas restricciones en el movimiento el martes, mientras que el presidente Joe Biden hizo un llamamiento a todos los estadounidenses para que se vacunaran para luchar contra la variante Omicron que barre el mundo días antes de la segunda Navidad de la pandemia.

Las infecciones por omicrónicas se están multiplicando en Europa, Estados Unidos y Asia, incluido Japón, donde un solo grupo de casos de COVID-19 en una base militar ha crecido a al menos 180.

“Si no estás completamente vacunado, tienes buenas razones para preocuparte”, dijo Biden en la Casa Blanca, donde dio a conocer planes para comprar 500 millones de pruebas rápidas de COVID-19 que se distribuirán de forma gratuita a los estadounidenses que las soliciten a partir de enero.

Llamando un tono terrible sobre los riesgos para el uno de cada cuatro adultos estadounidenses que aún no están vacunados, dijo: “Tu elección puede ser la diferencia entre la vida y la muerte”.