La promesa de Copenhague de misiles antibuque Harpoon y un lanzador a Ucrania, anunciada por los Estados Unidos el lunes, es la primera señal desde la invasión rusa en febrero de que Kiev recibirá armas de fabricación estadounidense que amplían significativamente su alcance de ataque.

Ucrania ha estado buscando armas más avanzadas, como defensas aéreas, misiles antibuque y cohetes de mayor alcance, pero hasta ahora la mayor parte de la ayuda ha sido en sistemas de corto alcance como las armas antitanque de jabalina y la artillería.

Los arpones, fabricados por Boeing Co. podría utilizarse para alejar a la marina rusa de los puertos del Mar Negro de Ucrania, permitiendo que se reanuden las exportaciones de cereales y otros productos agrícolas.