Con la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) para 2019, el gobierno federal busca cerrar las rutas a las bandas de defraudadores con facturas, pues se están devolviendo impuestos a “empresas fantasmas”, resaltó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

El subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera Gutiérrez, dijo que debido a que la LIF 2018 no incluye ninguna propuesta relevante de cambio a las impositivas, se incluyeron mecanismos para cerrar las rutas de elusión y defraudación que hacen empresas fantasmas con facturas.

En reunión en el Senado de la República con las Comisiones Unidas de Hacienda y Crédito Público, y de Estudios Legislativos, Segunda, refirió que la LIG 2019 limita la compensación universal de impuestos, pues ahora esta compensación se tendría que hacer entre un mismo impuesto y no entre impuestos distintos, como ocurre actualmente.

Refirió que en 2013, cuando se permitió la compensación universal entre impuestos, se pidieron devoluciones de Impuesto al Valor Agregado (IVA) por el equivalente a 130 mil millones de pesos, y para 2017, estas devoluciones se duplicaron, pues fueron de 260 ml millones de pesos.

“Lo que estamos buscando con cerrarlo, es cerrar un canal, incluso ni siquiera diría de elusión, tiene unos elementos de elusión, pero es un canal de defraudación, estamos devolviéndole IVA a empresas fantasmas, eso es lo que estamos cerrando”, subrayó.

El subsecretario de Hacienda y Crédito Público precisó que las empresas legítimas van a tener que usar otros mecanismos, pero de todas formas se les podrá regresar el IVA hasta en un máximo de 40 días, y en algunos sectores entre 10 y 5 días.

“No vemos que va a haber un gran costo para el contribuyente legítimo que está al día, pero sí vamos a poder cerrar un canal para aquellos que están abusando de lo que parecería ser ‘ex post’ una pequeña laguna fiscal”, subrayó.

Herrera Gutiérrez señaló que el paquete económico 2019 se sustenta en dos pilares: el compromiso absoluto con la disciplina fiscal y financiera, y la observación de los principios de austeridad.

“El gobierno de México usará el presupuesto público como una herramienta para el desarrollo, para reducir brecha de desigualdad y para la pacificación del país”, manifestó.

El paquete económico 2019, agregó, se basa en el compromiso de mantener la estabilidad macroeconómica del país, para lo cual se cumplirán las metas fiscales, sin aumentar la deuda pública como proporción del PIB y el balance primario será superavitario.

Además, el presupuesto será financiado sin crear nuevos impuestos y sin aumentar los existentes, y no habrá modificaciones a las reglas de coordinación fiscal, apuntó el subsecretario de la SHCP.

La minuta de la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) de 2019, remitida al Senado por la Cámara de Diputados, considera un total de cinco billones 838 mil 059.7 millones de pesos, con un monto adicional de 23 mil 768 millones de pesos a la propuesta del Ejecutivo.

El marco macroeconómico de la LIF para 2019 prevé un crecimiento real de entre 1.5 y 2.5 por ciento anual y, en particular, para las estimaciones de finanzas públicas se considera un crecimiento puntual de 2.0 por ciento real anual.

Asimismo, para el cierre del año próximo se proyecta una inflación de 3.4 por ciento, un tipo de cambio nominal promedio de 20.0 pesos y una tasa de interés nominal promedio de 8.3 por ciento.

Para la mezcla mexicana de crudo de exportación se considera un precio de 55.0 dólares por barril y una plataforma de producción de un millón 847 mil barriles de petróleo diarios.

Se plantea de igual forma un déficit público de 2.0 por ciento del PIB, un superávit primario de 1.0 por ciento del PIB y un déficit para los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) de 2.5 por ciento del PIB para 2019.

Se autoriza además un monto de endeudamiento neto interno para el Ejecutivo Federal hasta por 490 mil millones de pesos, así como un monto de endeudamiento neto externo de cinco mil 400 millones de dólares.

Este último incluye el monto de endeudamiento neto externo que se ejercería para la contratación de financiamientos con organismos financieros internacionales.

Mientras que para Petróleos Mexicanos (Pemex) se autoriza contratar hasta cuatro mil 350 millones de pesos de endeudamiento neto interno, y hasta cinco mil 422.5 millones de dólares de endeudamiento externo.

En el caso de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), esos montos son de hasta nueve mil 750 millones de pesos de endeudamiento neto interno y de 497.5 millones de dólares de endeudamiento neto externo.

Y para la Ciudad de México se autoriza un techo de endeudamiento neto para 2019 de cinco mil 500 de pesos, con el objetivo de financiar obras contempladas en su presupuesto de egresos local.

NTX