El encargado especial de Estados Unidos para la crisis en Venezuela, Elliott Abrams, negó este jueves que se tengan planes de una intervención militar en la nación sudamericana, aunque sí más sanciones y revocaciones de visas a los allegados al presidente Nicolás Maduro.
Ante el comité de Relaciones Exteriores del Senado, Abrams dijo no hay planes como tal, pero “siempre se analizan planes de contingencia para estar preparados si las circunstancias empeoran” y el presidente Donald Trump ha señalado que “todas las opciones están sobre la mesa”.
Añadió, sin dar más detalles, que entre los planes figura proteger las embajadas estadounidenses en el mundo y salvaguardar la seguridad de los ciudadanos.
El diplomático señaló asimismo que se quieren más sanciones contra el gobierno de Venezuela y que se rastrea a familiares de funcionarios del régimen de Maduro en otros países.
Con información de ARISTEGUI NOTICIAS