Se espera que la Reserva Federal anuncie el miércoles que está acelerando el final de sus compras de bonos de la era pandémica y señale un giro hacia los aumentos de las tasas de interés el próximo año como guardia contra el aumento de la inflación.

La identificación de la variante del coronavirus Omicron el mes pasado ha agregado un nuevo nivel de incertidumbre para los funcionarios del banco central de los Estados Unidos que, después de descontar constantemente el impacto de la pandemia en el rendimiento de la economía, ahora deben evaluar cómo la propagación más rápida de la nueva cepa puede influir en los consumidores, las empresas y el camino del crecimiento y la inflación.

Los pronosticadores privados encuestados por Reuters todavía esperan un crecimiento de los Estados Unidos de casi el 4% el próximo año, muy por encima de la tendencia, y están alineados en torno a las expectativas. La creciente preocupación de la Fed por la inflación hará que tire del enchufe del programa de compra de bonos, originalmente establecido en 120 mil millones de dólares al mes, en marzo y genere