Es poco probable que la Casa Blanca tome las medidas audaces para proteger el derecho de las mujeres a abortar que los legisladores demócratas han pedido en los últimos días, según muestran las entrevistas con los funcionarios.

El presidente Joe Biden prometió más tropas, aviones de guerra y buques de guerra estadounidenses para Europa, ya que la OTAN acordó el mayor fortalecimiento de sus elementos disuasorios desde la Guerra Fría en respuesta a la invasión de Ucrania por parte de Rusia.

Una investigación del Congreso sobre el asalto del 6 de enero a los partidarios del Capitolio de Donald Trump se enfrentaron a preguntas el miércoles sobre qué medidas había tomado para corroborar el relato de un asistente de la Casa Blanca de que el entonces presidente había luchado con agentes del Servicio Secreto en su SUV blindado ese día.

La OTAN calificó a Rusia como la mayor “amenaza directa” para la seguridad occidental después de su invasión de Ucrania y acordó planes para modernizar las asediadas fuerzas armadas de Kiev, diciendo que apoyaba plenamente la “defensa heroica de su país” de los ucranianos.

Suecia y Finlandia dieron un paso más cerca de unirse a la alianza militar de la OTAN después de la decisión de Turquía de retirar sus objeciones, pero todavía puede haber inconvenientes que superar, ya que algunos críticos dicen que el acuerdo da un veto de política exterior a Ankara.

Algunos estadounidenses sin acceso a abortos locales seguros a raíz del fallo de la Corte Suprema están buscando a los vecinos del norte y del sur del país para acceder a la atención reproductiva.

Las fuerzas rusas atacaron objetivos en la región de Mykolaiv, en el sur de Ucrania, el miércoles e intensificaron los ataques contra frentes de todo el país mientras los miembros de la OTAN se reunían en Madrid para planificar un curso de acción contra el desafío de Moscú.