Análisis de Renato Campos, analista senior de Hantec Markets
Por séptima reunión consecutiva el Banco Central de México decidió mantener sin cambios su tasa de política monetaria para asegurar neutralidad ante un nuevo escenario de presión que señalan los precios al conocer un incremento en su registro anual esta mañana.
El ente rector reconocerá el robusto crecimiento que señaló la economía durante 2023 pero presentando una desaceleración mayor a la prevista durante el 4to trimestre mientras el mercado laboral continúa resiliente, no obstante, los riesgos geopolíticos, un incremento en los precios a nivel mundial producto de las energías y las condiciones financieras restringidas en el mundo, no dejan de ser una preocupación para el entero rector mexicano.
El principal motivo para considerar una mantención en esta oportunidad, tal y como esperábamos, responde a la mayor previsión de IPC que se tiene para 2024, sin afectar la ruta a largo plazo para 2025.
Esperamos que el sesgo restrictivo/neutral permanezca hasta conocer más antecedentes de la inflación, la que continuará condicionando las decisiones futuras mientras el dinamismo parece estable y el empleo mejora.
El impacto sobre el cruce local luce tal y como lo esperábamos, teniendo en cuenta la fuerza la economía y el incremento en el precio de las materias primas, el deterioro del peso no es mayor sosteniendo su rango lateral de cotización, obviamente, sin dejar de presentar avances que lo podrían llevar hasta la parte alta del rango que se indica entre $17.40 y $16.70.–