Hasan Rohani asumió hoy un segundo periodo de cuatro años como presidente de Irán, en una ceremonia a la que asistieron más de 100 delegaciones extranjeras, incluidos ocho presidentes.

En su discurso, el mandatario destacó que este sábado se conmemoró el 111 aniversario de la primera Revolución Constitucional de Irán, la primera de su género en Medio Oriente.

Agregó este movimiento conllevaba dos significados principales: la gobernación de la constitución y la gobernación del pueblo, y que en realidad fue el primer movimiento nacional del pueblo asiático por libertad en el continente.

“Desde aquella fecha hasta hoy han pasado exactamente 111 años y esta Revolución ha enfrentado muchos desafíos”, expresó Rohani, tras resaltar que el pueblo iraní “ha hecho muchos sacrificios”.

Aseguró que no fue sino hasta “hace 40 años que la Revolución Islámica triunfó, y desde entonces el presidente del país es elegido por el voto de cada uno de los miembros de la sociedad, por el pueblo”.

“La presencia masiva del pueblo en las elecciones de mayo de este año no fue un accidente, sino muestra de la madurez social, por lo cual los cambios en el país deben ir según las peticiones de este pueblo y el poder ejecutivo debe tomar sus decisiones según ello”, abundó.

Anticipó que su gobierno será moderado, no caerá en provocaciones ni entrará en una guerra. “Este gobierno es partidario de la paz y siempre prefiere la paz en su política tanto interna como externa”, afirmó.

En referencia al uso de la “madre de todas las bombas” por Estados Unidos, Rohani declaró que es tiempo de estrenar la “madre de todas las negociaciones”.

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