Más de dos años y medio después de la pandemia volvemos a salir a las calles, a llenar restaurantes, asistir a eventos sociales, deportivos y de entretenimiento, a atorarnos en el tráfico. A usar cada vez menos el cubrebocas, a atender la sana distancia, a descuidar (a veces sin darnos cuenta) las medidas preventivas contra el COVID-19.

Como aquí hemos comentado, y que sin duda todos coincidimos, es que lo peor de la pandemia ya pasó.

Aunque el COVID-19 impactó de manera significativa nuestras vidas durante el primer año en todos los aspectos, permíteme, estimado lector, enfocarme en lo que al sector laboral respecta.

Sin duda, las oportunidades laborales fueron significativamente afectadas; el número de desempleados en México se disparó 31.3% a lo largo del 2020, respecto del 2019. No obstante, el mercado laboral durante el segundo año mostró una tendencia de recuperación y un incremento en el número de empleos al cierre de 2021, de acuerdo con INEGI; la mejoría no es grande, pero sí significativa.