Split Financiero

La que avanza abriendo un diálogo en la promoción de buenas prácticas empresariales sociales y medio ambientales es Grupo Vidanta, de Daniel Chávez Morán, ya que recientemente dio ejemplo de apertura y transparencia ante los señalamientos por parte de grupos ambientalistas en la región de Nuevo Vallarta, Nayarit. Se trata de la visita realizada el mes pasado a México por parte del del Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas en materia de derechos humanos, que comandó Pavel Sulyandziga, quien analizó expedientes del sector energético, medioambiental, agroalimentario, laboral, turístico, comunicaciones y transportes, procuración de justicia, atención a víctimas y pueblos indígenas, entre otros. Así, desde antes de que los emisarios de la ONU arribaran al país, y sin que les fuera solicitado, directivos de la empresa de Chávez Morán, se dieron a la tarea de documentar y respaldar cada uno de los señalamientos, en donde se detalla entre otras cosas el actuar legal y los permisos de dependencias como la CONAGUA de Roberto Ramírez, y la SEMARNAT de Rafael Pacchiano, expedientes que fueron enviados tanto a Naciones Unidas, como al gobierno federal y de Nayarit, de Roberto Sandoval. Con ello, el grupo desarrollador dejo ver ante las autoridades nacionales e internacionales que la protección ambiental constituye un componente integral en sus políticas y prácticas corporativas, en donde además destacan acciones como la gestión de residuos, reciclaje, limitación del uso de agua, reducción y reutilización de consumo de energía, uso de vehículos cero emisiones de carbono, programas de reforestación, protección y conservación de flora y fauna local, entre otros. Actualmente Vidanta mantiene operaciones en destinos como Nueva Vallarta, Riviera Maya, Acapulco, Maza-tlán, Los Cabos y Puerto Peñasco, en donde operan un portafolio de inversiones por más de mil 600 millones de dólares, y emplea de manera directa a 16 mil personas.