Concluyó el primer semestre de 2017 y de acuerdo a la estimación preliminar del INEGI, México acumula un crecimiento del PIB de 2.3% durante la primera mitad del año.
En particular, en el segundo trimestre de 2017 el avance de la economía fue de 1.8% a tasa anual (2.8% en el primer trimestre).
El segundo trimestre se caracterizó por una consolidación de la reactivación del sector externo. Las ventas al exterior se están convirtiendo de nueva cuenta en el principal motor de crecimiento de nuestro país. Sin duda, el desempeño actual de las exportaciones de México llega en buen momento, ya que el consumo interno del país comenzaba a dar señales de pérdida de dinamismo.
Estas buenas noticias en los datos, dan confianza de que la economía crezca por encima del 2.0% en la segunda mitad del año. Así, en CIBanco mejoramos nuestra estimación de crecimiento real de 2.0% a 2.3% para el PIB durante todo 2017 y mantenemos nuestra estimación para 2018 de un crecimiento de 2.5%. Los riesgos han disminuido al grado de que incluso la economía podría sorprender con mayores crecimientos a los estimados.
Estas tasas de crecimiento contrastan de forma significativa con la perspectiva existente al inicio del año. Los temores eran que la incertidumbre en torno a la relación comercial y de inversión bilateral con EUA le diera la puntilla a la ya muy afectada industria mexicana. Las preocupaciones recaían en el sector manufacturero que, junto con la debilidad estructural de la minería y la pérdida de dinamismo de la construcción por un menor gasto público, podría arrastrar al total de actividades secundarias. Con ello, la incertidumbre podría provocar un crecimiento del PIB inferior al 1.5%.
Así, después de pensar que 2017 sería un año con una pérdida significativa en el dinamismo de crecimiento, la expansión puede terminar siendo muy similar a la de 2016.
Esta mejora en la estimación, no sólo está sustentada en un mejor comportamiento alcanzado en la primera mitad, sino además a una perspectiva favorable para el segundo semestre.
En particular, existen por lo menos siete factores que contribuirían a que se consolide el crecimiento de 2.3% en lo que resta del 2017 son:
- Expectativa de que la renegociación del TLCAN sea exitosa para México
- Mejoras en el proceso de consolidación de las finanzas públicas del país
- Menor ritmo de alza de tasas de interés por parte de Banxico
- Baja probabilidad de reducción de calificación de la deuda soberana de México
- Crecimiento del PIB de EUA cercano al 2.0%
- Incrementos robustos de las exportaciones
- Consumo privado, aunque a menor ritmo, con crecimientos positivos, favorecido por una menor presión en precios, mejoras en el mercado laboral y aumentos en el crédito bancario.
A pesar de lo anterior, este escenario no está exento de riesgos, sobre todo aquello relacionado con la renegociación del TLCAN. Lo avanzado en este 2017 es sólo un paso en la dirección correcta para retomar el paso de confianza y perspectiva que se tenía del país hace un par de años (sólidos fundamentos económicos para enfrentar una posible tormenta financiera internacional).
Además, estos crecimientos (por debajo del 3.0%) distan mucho de ser los deseados o los óptimos para una economía como la nuestra.