Padres de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos exigieron indagar el vínculo entre el nuevo titular de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, Omar García Harfuch, y Sidronio Casarrubias, presunto integrante del grupo delictivo Guerreros Unidos.

En conferencia de prensa frente a las instalaciones de la Procuraduría General de la República reprocharon a la dependencia haberles ocultado a ellos y al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, información importante sobre las investigaciones del caso.

Exigieron que sea investigado el nuevo Jefe de laAIC, García Harfuch, y Leonardo Octavio Vázquez, quienes en septiembre de 2014 eran responsables de la Policía Federal en Guerrero, y secretario de Seguridad Pública del estado, respectivamente.

A ambos se les vincula con Guerreros Unidos, grupo criminal señalado como responsable de la desaparición de los normalistas en septiembre de 2014.

A Sidronio Casarrubias se le encontró una “libreta” con nombres y teléfonos, misma que le fue confiscada al detenido en octubre de 2014, y en la que aparecen como “contactos” los dos funcionarios citados.

Sin embargo, esta prueba nunca se incorporó a la investigación del caso Iguala ni se hizo conocimiento del GIEI, por lo que nunca se supo de la existencia de esta evidencia que revela un posible nexo con personas presuntamente vinculadas con la ejecución arbitraria y desaparición forzada de los 43 normalistas.

Los padres y madres de los 43 demandaron que en la investigación de estos dos funcionarios sean partícipes los integrantes del Mecanismo Especial de Seguimiento la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

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