Las principales bolsas en el mundo operan con resultados mixtos (ganancias en Europa y caídas en EUA), con los inversionistas evaluando el inicio de la temporada de reportes trimestrales de empresas estadounidenses.

   En EUA, las ventas al menudeo repuntaron en diciembre apoyadas por una mayor demanda de automóviles. En diciembre aumentaron 0.6%, con lo que en todo 2016 acumularon un avance de 3.3%, muy por encima del crecimiento durante 2015 (2.3%).

   Por su parte, los precios al productor de diciembre aumentaron 0.3% mensual, su tercer incremento en los últimos cuatro meses, influenciados principalmente por un alza en el costo de los combustibles. Con ello, la inflación anual al productor subió a 1.6%, su mayor avance desde septiembre de 2014.

   En materia de reportes corporativos, Bank of America y JP Morgan publicaron resultados correspondientes al cuarto trimestre de 2016 con ganancias, aunque sólo el segundo superó las expectativas del mercado. Por su parte, Wells Fargo reportó una caída en sus utilidades, todavía afectado por el escándalo de las cuentas abiertas sin autorización de los clientes. El sector financiero se ha beneficiado de las posibles medidas que implementará Trump sobre relajar la regulación impuesta a los bancos comerciales después de la crisis financiera de 2008.

   En China, las exportaciones en 2016 se contrajeron 7.7%, su segunda caída anual consecutiva y la peor disminución desde los tiempos de la crisis económica mundial de 2008-2009. Por su parte, las importaciones cayeron en 5.5%. La debilidad persistente de la demanda mundial y en medio de un escenario de preocupación por una posible guerra comercial con EUA, fueron los factores detrás de esta debilidad del sector externo del gigante asiático.

   El precio internacional del petróleo (WTI) registra un ligero retroceso a niveles por debajo de los $53 dólares por barril, manteniendo la volatilidad de los últimos días por las dudas existentes en torno al cumplimiento del acuerdo para reducir la producción de crudo en la OPEP.

   El peso mexicano vuelve a iniciar la jornada menos presionado, en niveles inferiores a los $21.70 por dólar spot, en medio de un escenario de depreciación generalizada del dólar frente a la mayoría de las monedas. Sin embargo, en el transcurso de las horas, la presión sobre el peso podría intensificarse porque las cifras económicas reportadas en EUA (ventas al menudeo y precios del productor) fueron positivas, lo que revaluaría al dólar.

   Por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre los $21.61 y $21.86 (el euro entre $1.061 y $1.068).

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