Entrevista a la escritora Fátima GalBos. ¿La vida es un sueño o una coincidencia?

Aves de Cristal, La Casa de los Pájaros

Fátima GalBos, es una escritora joven nacida en México. Este año empezó a circular su primer libro en el mercado digital y en el tradicional, en el del papel, conversamos con ella para conocer un poco más a la autora de Aves de Cristal, La Casa de los Pájaros.

¿Qué pensarías si el día de tu cumpleaños llega a tu casa el ejemplar de tu primer libro sin haber pedido que te lo enviaran ese día?, ¿cómo tomarías el hecho de que el mayor número de lectores de tu primer libro en formato digital esté en España, el mercado más grande respecto a la demanda de libros electrónicos?, ¿qué sentirías si en el intervalo en que estás buscando una editorial para lanzar  tu libro en papel te encuentras con la convocatoria de Amazon, publicas tu escrito en la web y se vuelve un éxito?

Esta es la experiencia de Fátima GalBos, autora del libro Aves de Cristal: La Casa de los Pájaros. Un sueño que tuvo en su adolescencia le dio vida a esta historia de la psicología thriller. Al paso de casi dos décadas una serie de acontecimientos le dio vida a su primer libro de 600 páginas.

Ella goza del proceso que da como resultado contar una historia. Es decir, la creación de la historia. “Desde que iba en la primaria me gustaba mucho leer y que me leyeran. Mi primer libro fue una historieta después de una ida al circo, tenía cuatro años. Ahí inició mi interés por contar historias”.

Fátima siente admiración por los cuentacuentos, “que se fuera la luz era lo mejor que podía pasar en mi casa porque contábamos historias de terror, de fantasmas”.

De cuando tenías trece años que tuviste el sueño e inspiró tu libro a la actualidad que lo publicaste, ¿cómo fue tu proceso de formación como escritora?

– En la primaria pasaba mucho tiempo haciendo comics, me encantaba que me leyeran. Cuando tenía 13 años en la escuela tenía que tomar las materias como todos los demás pero tenía una clara tendencia hacia escribir. Me gustaban las tareas de español que requerían escribir sueños, composiciones. Después en la preparatoria cada semana tenía que hacer una composición que se volvió un medio de expresión importante para mí. La maestra me dio confianza de expresar lo que venía a mi mente y es así como agarré sinceridad como escritora porque no tenía que ser tan estructurada. Pasado este tiempo tomé teatro varios años. Me encantaban los libretos, me fascinaba esa parte porque era contar historias.

Después viajé a Inglaterra para estudiar composición de novela ahí fue mi primer encuentro con la parte más cercana a la estructura de una historia y el estilo. Empecé a leer más sobre los estilos de escritura. Después estudié Ciencias de la Comunicación, en parte, porque había tareas de generar ensayos, composiciones.

– ¿Quién es Fátima Galindo?

– Me considero amante de la vida en el sentido dramático. Un amante está en constante conocimiento de lo que ama y tiene sentimientos encontrados respecto a lo que ama. Los aspectos positivos y negativos de la vida me hacen vivir de manera apasionada. Los aspectos que encuentro como negativos, lo absurdo o misterioso me hacen amar la vida.

faty8

Te recomendamos https://www.youtube.com/watch?v=Eay3oQMjb8E&feature=youtu.be

– En entrevistas anteriores mencionaste al amor como importante en tu vida, ¿qué representa el amor en tu vida a la hora de crear historias?

– El amor me mueve. Vivo con intensidad, entonces eso se traduce “en eres muy sensible”. Sé dar cavidad a mis emociones para expresarlas. Vivir me permite crear a mis personajes. Situaciones de muerte, odio, tristeza; o bien situaciones como la discriminación, el odio, me movieron mucho porque desde niña tenía muy claro que ese no era el objetivo de un ser humano. Para mí no había otra cosa que sentir amor, paz, divertirme con alguien querido, sentir la calidez de otra persona. El amor da intensidad a las cosas placenteras y hermosas. Pero la intensidad también es un contraste, con intensidad de igual modo se vive dolor, pena o angustia y por eso me amo viva.

El amor para mi es encender una vela, la enciendes y la llama es hermosa. La llama te atrae, te produce calor, te da una sensación de paz, de tranquilidad, de asombro, de maravilla. Pero también proyecta una sombra que puede dar miedo, ansiedad, puede ocultar cosas. Esa ambivalencia me llama la atención.

Mientras escribías tu libro, la gente pensaba que el libro no era un trabajo real, ¿cómo lograste el equilibrio entre tu pasión y esos comentarios?

– No tengo idea, creo que es un aspecto de personalidad, soy necia. Esto, que puede ser un aspecto negativo, me ayudó. Si para la gente no tiene valor escribir o no lo comprende está bien. No tengo porque admitir esos obstáculos. No es fácil escuchar 20 mil veces un no. Quizá para esas personas el éxito se visualiza de otra manera. Imagínate a una persona que no disfruta la lectura y menos escribir, enfrentarse con una persona que además de disfrutar la lectura le gusta escribir, debe ser difícil. Eso me ayudó.

– El sueño que tuviste de adolescente, ¿lo metiste en cloroformo para mantenerlo, recordarlo y escribirlo?

– No. Lo deje crecer. ¡Cuántas personas no quieren mantener situaciones de la vida en cloroformo para que las cosas no cambien! Para mí siempre fue un juego. A mí me gusta imaginar y constantemente estoy imaginando historias, paisajes. Ese hábito en mí empezó de chiquita. Me gusta imaginar historias mientras escucho música o veo un cuadro, pensar en qué llevó a ese fragmento en el tiempo para dejar situaciones plasmadas.

Eso mantuvo vivo mi sueño, en ese proceso de imaginar empezaron a surgir ideas, no tanto de crear porque crear es forzar. Hay personajes que crecen conforme nosotros crecemos, eso me ayudó a que la historia creciera y tomara mayor significado.

– Cuando soñamos es porque pasamos por circunstancias muy específicas, ¿atravesaste por alguna circunstancia cuando tuviste ese sueño? 

– Eso fue lo que me llamó la atención: era atípico, me parecía salido de la nada. En mi familia se acostumbra mucho el tomar en cuenta el simbolismo de los sueños, mi abuelita era buenísima en los asuntos de la psique humana. Había sueños muy específicos que podíamos soñar todas las mujeres de mi familia al mismo tiempo, eran experiencias interesantes.

Este sueño no tenía una conformación de los típicos sueños a los que estaba acostumbrada. Este sueño no se lo conté a nadie; era tan peculiar, tan particular, lo sentí tan íntimo que era algo para mí. Con el pasar del tiempo más bien empecé a ahondar en el mundo de los sueños, a leer libros, a consultar diccionarios de sueños. Más que interpretar ese sueño fue entrar a este mundo que tenemos al dormir que puede estar separado de nuestra vida cotidiana. El mundo de los sueños puede ser tan vívido como en la vida cotidiana.

Como regalo de cumpleaños, Fatima tuvo en sus manos el primer ejemplar de su primer libro el 27 de enero de este 2016, “Yo no pedí que el envío llegara ese día. Fue incidental”. Igual de incidental fue el hecho de encontrar disponible la convocatoria de Amazon para publicar en su plataforma digital los libros de nuevos escritores. Y ni qué decir de la aceptación de Aves de Cristal: La Casa de los Pájaros en España, país que según Libranda, la principal distribuidora de libros digitales a nivel internacional, es el mercado de mayor importancia respecto al consumo de libros en línea.

“Me parece incidental por mi resistencia a creerlo”. A pesar de su resistencia Fátima confía en su guía interna que la conduce por el mejor camino. Como escritora pienso en dar lo que está dentro de mí y quien lo disfrute es una ganancia impresionante.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.