“Dedicado a todos aquellos que han depositado su confianza en mi trabajo, en mi persona, en lo que valgo, y en lo que puedo aportar a mi país, al mundo”
Muchas veces, tenemos días malos, días que definitivamente nos levantamos con el pie izquierdo y decimos, “¡Ya valió!” A mi, me pasa muy seguido, “¡Aunque usted no lo crea!” Piensas que no vales lo que eres, que tu trabajo del día a día no marca diferencia, que simplemente no vales nada.
Alguna vez, en la secundaria, si la memoria no me falla, una niña se acercó y me dijo, “Xicani, tú no vas a tener novia, ni podrás tener una familia, ni mucho menos trabajar, como lo hace mamá y papá, porque estás en una silla de ruedas…” Se rió de una forma despectiva y se fue. Esas palabras taladraron mi alma y mi corazón como un puñal, me hirió, me destrozó. Jamás, se lo he contado a mi familia, se enterarán leyendo esta columna.
Afortunadamente, la vida tiene preparada grandes sorpresas, y conmigo ha sido muy generosa. Recuerdo cuando estaba apunto de terminar la universidad, me preguntaba, ¿Dónde podré trabajar y encontrar un empleo? ¿Me irán a contratar? No solamente me lo preguntaba yo, también mis compañeros y amigos. Yo, estaba aterrado. Tenía mucho miedo sobre mi futuro, no sabía a dónde iba a ir.
Pasaban los meses, los días, enviaba curriculums a muchos lados, y nada, Hasta que llegó una llamada del Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad. (CONADIS) Me comentaron que una fundación pequeña, estaba buscando un vocero para una campaña de concientización, en favor de la inclusión laboral para las Personas con Discapacidad. De aquí nace “¡Carta de Recomendación!”
Desde ese momento, llegaron personas muy queridas y especiales en mi vida, que me apoyaron a “¡CONFIAR EN MÍ!” Recuerdo que éramos ocho candidatos para ser el vocero de esta campaña, y yo dije, “No me lo van a dar, porque no tengo experiencia”
A lo largo de mi andar por la vida, mis padres me enseñaron e que “¡El que persevera alcanza!” Que hay que ir detrás de lo que siempre soñamos, con dignidad y HUMILDAD.
Así que, después de los procesos de selección, recuerdo que cada semana le llamaba a Ileana, en ese entonces, directora de la fundación. (Creo que ya me soñaba de tanto que le llamaba. Ja ja ja) Así estuve un mes entero, hasta que por fin, llegó la llamada que estuve esperando por mucho tiempo. Tipo, Big Brother… “¡Xicani, tú, tú eres el elegido!”
En ese momento, lloré de la emoción, no solo porque fui el elegido, lo más importante. Era el vocero de la inclusión. Tenía en mis manos la oportunidad que tanto busqué para demostrar de qué estaba hecho. Y en base a eso, más Personas con Discapacidad tendrían la oportunidad de tener un trabajo digno y remunerado. Una responsabilidad enorme, de la cual me siento muy honrado y satisfecho.
Ahí, llegaron las primeras personas que marcarían un parteaguas en mi vida, las que me dieron mis primeras alas para volar y muchos pantalones para enfrentar este gran reto. A la Fundación ParaLife, a Gabriel, (Mi amigo, mi hermano) a Ileana, mi amiga, Sabine, a todo el consejo, por apoyarme y darme las herramientas para comenzar a navegar en el ámbito laboral. La agencia Publicis México: (Héctor, Jessica, Madruga, Selene, Lilián, Stefany, Alan, Paulina, Gaby, toda la banda) Porque con ellos, fui descubriendo quién era Xicani en el campo laboral. A Toto, mi gran amigo, por contar mi historia de vida en un minuto, por permitirme aportar, y por llegar a mi vida. A Valeria, a Chewbacca, por acompañarme a plasmar mi vida y ser el empuje en mis victorias y caídas.
Después de todo este aborigen, por fin vino mi primera oportunidad laboral, como resultado de mi prueba, durante la campaña. Masisa México.
Aquí, no solamente tuve a mis primeros jefes, mi primera oportunidad de tener un salario fijo, prestaciones, etc… Aquí, conocí a seres humanos como yo, mis mentores, mis grandes amigos, que sin conocerme, me escribieron y me mostraron so afecto y cariño. Agradezco tanto a Leo, mi mentor y amigo, por depositar su confianza y descubrir ese potencial que no sabía que existía. A mi querida Lili, por ser mi voz de apoyo y amiga, no solo por ser mi primera jefa, ella fue la que le propuso a la empresa mi inclusión. Gracias, Lili. A Janis, por ser mi compañera de batalla y amiga. ¡Te amo jefa! A mis compañeros, por ser inspiración desde el primer día, y por recordarme siempre lo que valgo como persona. ¡Gracias, infinitas gracias!
Hace 4 años, tuve la fortuna de comenzar un sueño. Por recomendación de Alejandra Carvajal, conductora y amiga, a quién le estoy sumamente agradecido, me recomendó en la empresa que todo comunicador y periodista, busca entrar, Televisa. Concretamente con el Licenciado, Luis Cabeza. Vio mi video y me pidió una entrevista. Leía y releía el correo electrónico. La gran oportunidad que estaba esperando.
Nunca imaginé las grandes lecciones y oportunidades de conocer a extraordinarias personas, seres humanos. El Licenciado Cabeza, no solamente es mi amigo, es mi mentor, esa persona que siempre tiene las palabras correctas. Gracias a él, tuve mi primera oportunidad de demostrar mis habilidades en Televisa, pero sobre todo, de conocer el lado positivo de la vida.
También, quiero mencionar con enorme aprecio al Licenciado Alejandro Olhovich, por la confianza que me ha depositado, para ser parte de los embajadores de la Alianza Éntrale, iniciativa del Consejo Mexicano de Negocios, en donde participan más de 100,000 empresas. Al Licenciado Fernando Muro, por sus consejos y por tenderme la mano.
Al señor Emilio Azcarrags, por su visión y compromiso en pro de la Inclusión Laboral. Por su amistad y confianza.
Pero sobre todo, gracias a mi familia, (Mamá, Papá, Hermana) Por ser mis primeros amigos, por siempre inspirarme. A mi familia y amigos, porque siempre me recuerdan esta frase. “¡CREO EN TI!”
Con cariño y gratitud:
#SoyXicani
