Dicen que la familia es la base de todo, y más porque sabemos que de ella, parten los pilares para la formación de seres humanos.
Para mí, hablar de lo que significa mi familia, es sinónimo de gratitud, respeto y amor, primero por el hecho valioso de ser mi linaje, mi sangre, y segundo y lo más importante, gracias a ellos, es que pude encontrar un lugar en la sociedad, sí, porque desde el minuto cero de mi vida, me han acompañado, con todo y lo que implica una discapacidad.
Mamá me cuenta en las “charlas de café” que cuando nací en 1988, “¡ya llovió!” los médicos le decían que iba a ser muy complejo para ellos tener un hijo prematuro, y sobre todo, costoso, muy costoso. Ellos por supuesto, aterrados ante la situación, por ser padres primerizos y recibiendo noticias de este tipo, “se fajaron los pantalones” como decimos en México, y dijeron “¡es nuestro hijo!” con lágrimas en los ojos, le doy gracias a Dios y a la vida por ponerme en el camino de Yolanda y Jesús, por nunca soltarme y por siempre alentarme a incluirme en esta sociedad, una sociedad que al ver una silla de ruedas, no sabe cómo reaccionar, algunos te juzgan sin ni siquiera soltarte a ver o preguntarte cómo te llamas. Y sin embargo, mis padres, le enseñaron al resto de la familia la cultura de la inclusión de las Personas con Discapacidad. Eso, me enseñó a vivir en armonía y equilibrio.
Existe una opinión generalizada en la sociedad, compartida también por los profesionales de la educación, sobre el papel relevante de la familia y su influencia en la evolución y desarrollo de los miembros que la componen. Aunque ésto esté aceptado de manera global, se pone cada vez más de manifiesto la necesidad de un nuevo replanteamiento en las propias familias de esa función esencial e insustituible en la educación de los hijos.
“En las familias, además de luchar por
el desarrollo de todas las capacidades del hijo
con discapacidad, debemos continuar con nuestra
independencia habitual”
¿Por qué escribo esto?
Porque cuando un miembro de la familia tiene alguna discapacidad, (ya sea de nacimiento o adquirida) Inmediatamente viene un shock dentro de la familia. El hecho se percibe como algo inesperado, extraño y raro, que rompe las expectativas sobre el hijo deseado. Cuando es de nacimiento, como la que yo padezco, durante toda la etapa anterior al nacimiento, en la fase del embarazo, lo normal es que los futuros padres tengan sus fantasías sobre el hijo; imágenes físicas y características del nuevo ser que se incorporará al núcleo familiar. A lo largo de los nueve meses (y en ocasiones, antes ya) esas expectativas se han ido alimentando esperando con ansia el momento del nacimiento. La pérdida de expectativas y el desencanto ante la evidencia de la discapacidad (o su posibilidad), en un primer momento va a ser demoledor; es como si el futuro de la familia se hubiera detenido..
Y cuando es adquirida, por accidente, el shock es mucho mayor, esto porque la mayoría de las veces, los proveedores de la familia sufren la discapacidad, o jóvenes con una vida por delante. De inmediato, la discapacidad se expande a la familia completa, porque se ven obligados a modificar su estilo de vida.
Es por ello que nace la Fundación Vuelo Libre A.C. Un idea de dos mexicanos, Yolanda López Gómez y Xicani Godínez López, como respuesta a la falta de equidad y cultura, que existe en la rehabilitación física y psicológica para jóvenes con discapacidad adquirida en México. Su sede se encuentra en el Estado de México y área metropolitana.
Nuestra misión a grandes rasgos es: Acompañar a la Persona con Discapacidad y su familia, brindándoles apoyo psicológico y empoderamiento para reinsertarlos a la sociedad, generando la independencia social y laboral.
Así mismo, brindamos terapia física, con el objetivo de llegar a restablecer la condición motriz y recuperar las funciones básicas.
Por todo esto y mucho mas, manifiesto mi compromiso con mi país, con la sociedad, para que sigamos rompiendo barreras sociales y arquitectoicas, para que las Personas con Discapacidad, dejemos de ser “invisibles para ser Visibles” y poder tener una familia y una sociedad más incluyente.
Xicani.
